El pasado sábado 8 de junio tuvo lugar una sesión formativa y de trabajo de todas las entidades diocesanas y de congregaciones religiosas que trabajan en el área de acción social de la Archidiócesis de Tánger. La reunión tuvo lugar en el Centro Cultural Lerchundi de Tánger, una de estas entidades, durante toda la mañana. La convocatoria se realizó desde el responsable diocesano del área de acción social, P. Manuel Canovas, osst, y contó con la participación de una veintena de personas provenientes de Asilah, Ksar el Kebir, Tetuán, Martil, Alhucemas, Nador y Tánger. También contó con la presencia del arzobispo diocesano, Fr. Emilio Rocha, ofm, recién llegado después de su ausencia por motivos de salud.
La temática fundamental que se ha profundizado es el enfoque de bienestar y salvaguardia de las personas atendidas en las diversas obras de acción social presentes en la diócesis, así como de los mismos trabajadores y el voluntariado de estas entidades. Este enfoque viene dado, no solo por la mayor sensibilidad de la sociedad en general hacia estos temas, sino sobre todo por la opción evangélica preferencial hacia los pobres, excluidos o marginados que alienta la vida de la Iglesia.
Para conducir la sesión, estuvieron el P. Alvar Sánchez, sj, director de Cáritas diocesana de Tánger, y Maria Jesús Martín, coordinadora diocesana de la entidad, que aportaron como base inicial, los protocolos y documentos de Caritas Internationalis en esta materia: código ético, código de conducta, normativa para la salvaguardia de menores y adultos vulnerables, canales de denuncia, etc.
La primera parte de la matinal consistió en la presentación de las diversas obras, en cuanto a características generales y a los instrumentos de salvaguardia de los que disponen. Esta presentación permitió conocer el amplio y variado abanico de situaciones y de servicios que se ofrecen desde la acción social diocesana.
En un segundo momento, se trabajó en grupos y después en plenaria, valorando la mejor manera de avanzar en el campo de la salvaguardia. El consenso general de todas las entidades presentes se orienta a dotar a la Archidiócesis de Tánger de un marco normativo común, de acuerdo con la legislación marroquí, en materia de bienestar y salvaguarda de las personas, así como de una estructura diocesana para acompañar las diversas organizaciones de acción social presentes en el territorio en esta materia.