
La Archidiócesis de Tánger expresa su profundo pesar por el fallecimiento del Papa Francisco, ocurrido a la edad de 88 años.
La Iglesia que peregrina en Tánger se une en oración y encomienda su alma al Señor, agradeciendo a Dios por el inmenso testimonio de vida, fe y misericordia que ha dejado como legado a la Iglesia universal y al mundo entero.
El Papa Francisco será recordado con especial cariño en nuestra diócesis por su incansable esfuerzo en el acercamiento fraterno a nuestros hermanos musulmanes y por su firme compromiso con el ecumenismo. Supo tender puentes donde otros levantaban muros, guiado siempre por una convicción evangélica que lo llevó a salir al encuentro del otro, sin miedo, con humildad y compasión.
El arzobispo de Tánger, Monseñor Emilio Rocha, OMF, ha querido subrayar el carisma conciliador del Papa Francisco, así como su natural patrocinio de cuantos sufren en el mundo, más allá de credos o fronteras. “Francisco nos enseñó a mirar el dolor humano con los ojos del Evangelio y a responder con gestos concretos de amor y de justicia. Su pontificado ha sido un faro en medio de tantas oscuridades”, ha declarado.
Desde esta tierra de encuentro entre pueblos, culturas y religiones, damos gracias a Dios por la vida del Papa Francisco y rezamos por su eterno descanso, seguros de que su voz seguirá resonando en el corazón de cuantos buscan la paz.